
El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad ha confirmado que durante el 2015, el gasto farmacéutico público ambulatorio sumó 9. 534 millones de euros, un 1,86% más que el año anterior. De esta manera, los datos consolidan una tendencia a la estabilidad y un ahorro para el Sistema Nacional de Salud (SNS), ya que en 2014 también creció con un porcentaje similar al actual, dejando atrás las acentuadas caídas de 2011, 2012 y 2013. Además, la mitad de los medicamentos son genéricos, lo que revela que España se acerca a la media europea. Sin embargo, a pesar del aumento, los datos de gasto farmacéutico público se sitúa en los niveles del año 2004.
En cuanto al gasto medio de las familias en las recetas, la cifra se sitúa por debajo de los 11 euros, un 0,31% más que el año anterior. El motivo que justifica esta tendencia al alza se debe, en parte, a la reforma sanitaria impulsada por el partido popular, dado que ha continuado con las medidas de contención del gasto y fomento de uso racional de los medicamentos, incorporando en 2015 la actualización de los nuevos conjuntos y precios de referencia, así como de las agrupaciones homogéneas de medicamentos, entre otros. Con respecto al número de recetas facturadas, el año pasado se alcanzó los 882 millones de euros, un 1,55% más que en 2014.
En lo que atañe al gasto farmacéutico de cada comunidad autónoma, la quien ha liderado el ranking ha sido Cantabria, que ha crecido un 6% más. Seguidamente le acompañan en el pódium otras dos regiones del Norte, en concreto La Rioja y Navarra (5,19% y 4,42% respectivamente). Mientras que los territorios que menos han podido percibir el incremento del gasto farmacéutico han sido Castilla-La Mancha y Andalucía (0,88% y 0,95%), a excepción de Galicia, que ha sido la única comunidad autónoma de España que ha descendido su gasto farmacéutico en un -0,7%.